
julio 27, 2018 3 lectura mínima
Actualizado el 13 de enero de 2021
El verano en Ohio significa una cosa: tu patio o jardín es EL lugar ideal. Desde barbacoas los sábados por la tarde con familiares y amigos hasta veladas románticas disfrutando del vino a la luz de las velas y las luciérnagas, no hay nada más satisfactorio que un espacio exterior bien equipado. Pero una gran satisfacción conlleva una gran responsabilidad, y tus mesas y sillas de patio pueden requerir un poco de cuidado para mantenerse en óptimas condiciones. Por suerte, ninguna de las tareas que tendrás que hacer es muy difícil. Sigue leyendo para descubrir cinco consejos rápidos que te ayudarán a disfrutar de la naturaleza durante muchos veranos.

1. Proteja sus muebles del sol y la lluvia. Los muebles de exterior están hechos para resistir las inclemencias del tiempo, pero con el tiempo, la exposición a las inclemencias del tiempo acabará pasando factura. Guardar los artículos bajo un techo protector limitará su exposición al sol y la lluvia, duplicando o incluso triplicando su vida útil.
Una estructura de sombra para exteriores resistente a la intemperie cumple una doble función: es un elemento central atractivo para sus actividades al aire libre y protege su mesa y sillas en las horas de ocio. Un mecanismo deslizante fácil de usar gira el toldo según sea necesario, y un pedal en la base permite girarlo 360 grados para una máxima cobertura.

2. Mantén tus cosas limpias. Si te mantienes al día lavando la mesa y las sillas del patio durante cinco minutos aproximadamente una vez a la semana, evitarás los dolores de cabeza que surgen después por la acumulación de suciedad, mugre y polen. No necesitas una hidrolavadora; hazlo fácil quitando las hojas y ramitas sueltas y luego rociando tus muebles con la manguera. ¡Listo!
3. Use productos de limpieza seguros para materiales para una limpieza más profunda. En cuanto a los muebles de exterior, cada material requiere diferentes métodos y productos de limpieza. Los cojines de tela pueden lavarse con un detergente suave y luego secarse al sol. El mimbre debe cepillarse con una solución de lejía y agua para eliminar el moho y luego enjuagarse con una manguera de jardín de chorro fino. La madera debe lavarse con una mezcla de agua, detergente y lejía usando una esponja ligeramente abrasiva. El metal puede frotarse con un cepillo y un poco de agua y detergente, luego cubrirse con una fina capa protectora de cera para autos y pulirse.

4. Guarda los cojines cuando no los uses. Incluso las telas más resistentes son susceptibles al moho, la decoloración solar y la acumulación de suciedad y polen. Por eso, es recomendable guardar los cojines de exterior en un lugar fresco y seco cuando no los uses. Si tienes espacio, invierte en varias cajas de almacenamiento para exteriores u opta por una solución de almacenamiento interior de fácil acceso en la entrada o el garaje.
5. Cubre o guarda tus muebles fuera de temporada. Al llegar el final del verano (ya que todo lo bueno se acaba), es crucial guardar adecuadamente tus muebles de exterior. La nieve y las temperaturas extremadamente frías reducen significativamente su vida útil, mientras que un almacenamiento adecuado garantiza su larga y feliz existencia. Un cobertizo o garaje exterior son perfectos (un trastero también sirve si no tienes ninguno de ellos). Solo asegúrate de lavar y secar bien tus muebles antes de guardarlos para que estén listos para usar y en perfectas condiciones cuando vuelva el sol.