
noviembre 05, 2018 3 lectura mínima
Si crees que tu casa necesita una renovación, considera el estilo rústico: relajado pero elegante, con un encanto vintage inconfundible. Un poco de modernización puede aportar mucho carácter a un espacio que se está volviendo un poco monótono, y su estética combinable te permite combinar piezas nuevas con antigüedades reutilizadas para crear un estilo personalizado y propio. Aquí tienes algunas ideas fabulosas de Furniture Fair para empezar.
1. Dale un toque moderno a tu sala. La pieza central de cualquier sala, por supuesto, son sus muebles . Imagina asientos mullidos en tonos neutros claros, cubiertos con mantas y cojines cómodos. Si cambiar el sofá no entra en tu presupuesto, puedes renovarlo con mantas elegantes en colores alegres. Combina un cojín nuevo con una colcha de segunda mano para lograr la combinación perfecta entre lo nuevo y lo viejo.
2. Considera un diván. Nada evoca tanto la nostalgia de las noches de verano de la infancia en el porche de la abuela como un diván. Además, son súper prácticos, ya que sirven tanto para descansar durante el día como para dormir por la noche. Haz que tu habitación de invitados sea tan acogedora como un domingo por la mañana con una opción clásica con estructura de metal, que ofrece la ventaja de una cama nido para mayor espacio de descanso sin ocupar espacio. Combínala con ropa de cama en blanco impecable con texturas acolchadas y sus encantadores detalles de volantes y pliegues de estilo rústico.
3. ¡Presume de tus artículos (de mercadillo)! ¡Buenas noticias! Ahora puedes pasar el fin de semana recorriendo tiendas de antigüedades, mercadillos y tiendas de segunda mano en busca de una mezcla ecléctica de tesoros únicos para añadir a tu colección. Máquinas de escribir antiguas, básculas postales antiguas, jarras de cristal de leche y bandejas de desayuno estampadas son una buena opción. Hazte con una pieza rústica pero funcional para exhibir con orgullo todas tus acogedoras chucherías campestres con estilo.
4. Encuentra usos decorativos para objetos prácticos de granja. Las casas de campo de la vieja escuela se centraban en la practicidad sencilla y hogareña, sin lujos. Apila libros viejos y desgastados y átalos con cordel, o coloca una puerta vieja y desportillada en una esquina para añadir dimensión a una habitación con aspecto de cubículo. Una vieja escalera para recoger fruta se convierte en un llamativo toallero de baño; una lata metálica para almacenar leche se convierte en un jarrón para colocar ramos de flores silvestres recién cortadas. El cielo es el límite cuando se trata de reciclar objetos cotidianos de antaño.
5. Celebra los defectos y acabados imperfectos. Las maderas mixtas, los acabados sin tratar y la pintura descascarada son bienvenidos, ¡lo que hace que este estilo sea tan fácil y divertido! Al comprar piezas importantes, opta por un aspecto más desgastado que genere un interés rústico con un efecto envejecido artístico único pero atemporal. Añade un toque rústico y espacio de almacenamiento para tu vajilla antigua con un acabado clásico encalado, que también sirve como mesa de servicio cuando necesitas más espacio en reuniones grandes.
6. Suaviza el color. Para asegurarte de que la mezcla y combinación sigan creando una sensación cohesiva, opta por una paleta de colores más deslavada. Elige un par de colores de acento que prefieras y combínalos para que tu casa no parezca una tienda de antigüedades. Los blancos y los cremas reflejan la luz natural de maravilla y crean un ambiente relajado y aireado. Ten esto en cuenta al comprar y estarás en el camino correcto para crear la casa de campo de tus sueños.